Tercera y última entrega de la serie «Confidencias con Leopoldo Abadía«, precedida en el blog de José María Fité en https://jmfite.com por «La Clave del Éxito» y «La Familia Empresaria«. En este último capítulo Leopoldo Abadía nos habla sobre el salto generacional y aporta claves para la óptima convivencia de las distintas generaciones, los «seniors» y los «juniors», apuntando a valores y actitudes – como la prudencia y el talento – que redundarán positivamente en el futuro.

Tengo que respetarles

José  María Fité: Una fuente originaria de problemas en la empresa familiar son las diferencias de mentalidad entre una generación, llamemos “senior”, y la que le sucede o generación “junior”. La pregunta que deseo hacerte es doble. ¿Qué mensaje mandarías a los mayores y, a su vez, qué deberían hacer bien los jovencitos, para que la empresa fuera lo mejor posible?

Leopoldo Abadía: Yo ahora aquí [en su casa] vivo con dos nietos míos. Ahora que no tenemos a nadie, mi mujer dice que hemos hecho un colegio mayor [ríe], porque uno de ellos trabaja aquí y tiene su familia en Méjico, otro estudia y tiene su familia en Palma, y viven aquí. En las cenas y en las comidas de vez en cuando dicen cosas: “Voy a montar un negocio que…” Y claro, con mucha frecuencia tienes la tentación de decir: “Eso es una tontería, hombre”. Pero hay que callarse.

Otras veces lees algo de lo que no entiendes nada, se lo pasas a un nieto tuyo y te dice: “¡Qué interesante!”. Me ha pasado últimamente con la revista del IESE; la empecé a mirar y solo entendí la palabra “IESE” [ríe]. Que si la Inteligencia Artificial, que si el Big Data… Se la pasé a mi nieto y me dijo: “Abuelo, esto es interesantísimo, ¿cómo me suscribo a la revista?” ¿Qué quiere decir esto? ¡Que tengo que respetarles!

Prudencia

Leopoldo Abadía: Por parte de los viejos hay que darse cuenta de que las cosas han cambiado mucho más y a una velocidad tremenda. O sea, hace 10 ó 20 años las cosas iban cambiando, pero no a la velocidad de estos últimos 10 años. Esto hay que meterlo en la cabeza de todos con prudencia. Claro, si tu mañana vas al señor mayor, al senior, y le planteas una cosa que es un “no sé qué”, y el “big data” y «lo de más allá», el pobre señor podrá decir: “¡Prohibido! Aquí no se hace más que lo de siempre!” Bueno, pues habrá que metérselo de otra manera: con prudencia. Te diría, por tanto, me parece que por parte de los senior tenemos que estar con la mente abierta para asumir que las cosas han cambiado mucho. Y por parte de los junior, la prudencia.

Un poco de talento por parte de todos

Leopoldo Abadía: El junior debe también pensar que si este senior montó este negocio y lleva unos cuantos años, algo tendrá. Y el viejo debe ver que estos chavales que parecen tontos todos, algo tendrán. Y este reconocimiento cuesta, más por parte de los viejos que de los jóvenes. Los jóvenes pueden llegar a un momento que se enfaden y digan que “aquí no hay nada que hacer”, “yo me voy” y esas cosas. Pero me parece que con un poco de talento por parte de todos, esto se hace.